Los suelos disponibles en edificios, hogares y construcciones son tan variados y distintos que la lista se hace interminable, prácticamente. No obstante, en el presente artículo los técnicos de Megaservice se han centrado en los suelos porosos y su limpieza.
A continuación, explicaremos en qué consisten estos suelos, cuáles son sus características y, sobre todo, cómo llevar a cabo su limpieza de forma efectiva y profunda. ¿Quieres saber más sobre esto? ¡Sigue leyendo!
Información
¿Qué es un suelo poroso?
Los suelos porosos, tal como su nombre indica, son aquellos que debido a su material principal de composición poseen una gran porosidad, valga la redundancia, y una gran capacidad de asumir y filtrar líquidos y sustancias, haciendo que las manchas sean más complicadas de extraer.
Tipos de suelos porosos
Los suelos porosos más clásicos y comunes en cualquier construcción son los siguientes, los cuales poseen las características que mencionamos también a continuación:
- Suelos de vinilo: la porosidad de este tipo de suelo tiene un objetivo: evitar posibles accidentes cuando está mojado, imposibilitando así los resbalones.
- Suelos de cerámica: este material es uno de los más porosos por excelencia. Asimismo, la rugosidad de estas baldosas imposibilita su limpieza, pero las convierte en más antideslizantes y más seguras.
¿Cómo limpiar un suelo poroso?
El principal truco para que la limpieza de un suelo poroso sea efectiva es su correcto mantenimiento. Asimismo, hay que tener en cuenta que al ser un tipo de suelo delicado, los métodos de limpieza deben ser delicados, evitando que sus propiedades porosas y su aspecto no se vean perjudicados.
En cuanto a los métodos de limpieza, el más recomendable es el agua. Si se tiene la posibilidad de poder extraer cualquier mancha con la proyección de agua mediante una manguera o foco, e incluso el vapor, siempre será mejor para la conservación de este suelo.
En concreto, el vapor permite ya no solo eliminar la mancha conservando el buen estado del material, también acaba con todas las bacterias que pueden llegar a acumularse en la superficie rugosa y desigual de estos tipos de suelo poroso.
En cuanto a los detergentes, los más recomendables para la limpieza de suelos porosos son los siguientes:
- Detergentes neutros: prácticos y poco agresivos. Se recomiendan para la limpieza habitual y el buen mantenimiento de los suelos porosos.
- Detergentes ácidos: permiten acabar con las manchas orgánicas de forma efectiva y rápida. Por ello se usan y se recomiendan para los suelos porosos con mucha suciedad que necesitan una limpieza y desinfección profunda.
